Una pregunta que todo ser
buscador se hace en algún momento de su vida es quién soy yo? O qué soy yo?
Muchos se miran al espejo y dirán: Un hombre/mujer atractivo(a), entonces quiere decir que si pierdes esa belleza dejarías de ser tú? Esta descripción tan sólo se limita a la apariencia física. Otros, podrían describirse en base a su profesión, intelecto, estatus social, personalidad, entre otros. Pero todo esto es pasajero, son cosas que sólo describen lo que crees ser o más bien tu ego, que es el personaje ficticio que ha sido creado y el cual has desarrollado a través de la vida, a tal grado que muchos creen que si pierden su estatus, su posición social, si dejan de ser testarudos, agresivos o permisivos estarían dejando de ser ellos mismos.
Eres
más que un cuerpo físico y cuerpo mental, pero la gran mayoría cree que es
aquello que percibe a través de sus cinco sentidos. (Vista, tacto, olfato, gusto, oído). Empezamos con lo más simple y obvio. Ves a
través de tus ojos, oyes a través de tus oídos, sientes a través de tu cuerpo,
y piensas a través de tu cerebro.
Pero
tú no eres ni tus ojos, ni tus oídos, ni tu cuerpo, ni tu cerebro, éstos son
sólo instrumentos a través de los que experimentas, sientes o vives el mundo.
Esto
es sencillo de entender y aprender, recuerda que cualquier cosa que se te pueda
arrebatar, o que se te pueda quitar, no puede ser tú.
Por
ejemplo, si tu vestimenta, tu cabello o tus ojos se te quitaran; realmente sin
ellos estarías desnudo, calvo, sin visión del mundo, pero continuarías siendo
tú.
Ego significa “yo” en
latín, y hace referencia a nuestro yo personal, nuestra personalidad. Muchos lo
confunden con el espíritu original, pero es todo lo contrario, ego es el
individuo separado, alejado de Dios y de los demás, y es también el prisma
mental con el que este percibe al mundo, ya que sólo podemos verlo a través del
filtro de nuestros pensamientos, creencias y recuerdos.
Debes
entender que también forman parte del ego todos los elementos que componen tu
personalidad como por ejemplo tus pensamientos, deseos, creencias, recuerdos. Estos elementos son pasajeros, pues con el
tiempo cambian y sin embargo aunque todo eso pase, tú sigues
existiendo.
Si observamos detenidamente dentro de nosotros, notaremos que hay una inmensidad de instintos, deseos, pensamientos, emociones donde cada una ellos
lucha por ser el protagonista de nuestra vida, provocando un gran conflicto
interno.
El miedo es el recurso máximo del ego, y éste no es más que ausencia de amor. Donde no hay amor, aparece el miedo, y por
eso el ego cree que tiene que protegerse de los otros, pues su falta de amor le
lleva a tener miedo de ellos. Los ve como competidores en un mundo de cosas
insuficientes para todos. Y tiene miedo porque cree en el ataque, ya que es lo que
él
siempre ofrece, pero justificándolo como una defensa. Por tanto, el ego tiene
siempre necesidad de defensas, las cuales son también formas de ataque con una
justificación incluida.
El ego no puede ver a los
demás de otra manera que no sea la suya propia, puesto que siempre vemos a los
demás de la forma a través de lo que somos o pensamos. Tenemos que apartar sus
lentes de nuestra vista para recuperar la visión más allá del ego. Estas lentes
son creencias erróneas que acumulamos en nuestra memoria y nos hacen ver la
vida bajo su punto de vista temeroso. Por ejemplo, nuestro ego acusa a los
otros de ser los culpables de lo que le sucede a él, tratando siempre de
proyectar y trasladar siempre su propia culpabilidad fuera de él mismo,
cargándosela a otros. Y nosotros, en
nuestra ignorancia, le creemos y seguimos sus dementes propuestas y sus juicios,
los cuales nos provocarán aún más conflictos.
El
ego se refuerza a través de la manipulación del sistema a la que estamos expuestos
constantemente. Los medios de comunicación nos manipulan para comprar cosas que no necesitamos, convirtiéndonos
inconscientemente en esclavos del sistema. El mensaje que nos envían es que
para ser libres y felices necesitamos comprar cosas, necesitamos ciertos
bienes…
Si
analizamos la vida de la mayoría de personas, veremos que se pasa la vida comprando cosas que ni
siquiera necesita, con dinero que
tampoco tiene (prestado, a crédito), para sorprender a gente que ni siquiera
conoce.
Todo esto nos lleva a los errores y la desilusión
que inevitablemente trae consigo la ignorancia de la verdad. Pasándonos la vida actuando como ratas que
corren tras la misma rueda para al final
terminar cansados de no alcanzar la
felicidad anhelada; aunque hacemos todo
lo que nos dicen, todo para conseguir lo
que se supone que da la felicidad: Dinero, fama, sexo, poder, placer…Vemos que aunque
alcancemos todo eso, nos quedamos mucho más
vacios. Pero a pesar de esto, la
gente no se resigna, la mayoría se niega a pensar que la felicidad no está ahí
y prefiere pensar que está a la vuelta de la esquina, porque le duele reconocer
que tiene toda la vida luchando por algo que no vale la pena, porque está buscando
fuera lo que ya existe dentro de sí.
Creo
que todos o al menos la gran mayoría coincide en que no lo conocemos todo, que
existe algo más y que tenemos potencialidades dormidas que debemos despertar.
Muchos le atribuyen este poder a un ser superior, otros creen que esta dentro
de sí mismos, pero independientemente de la creencia, lo importante es que existe esa fuerza, ese poder, esa energía superior,
y todos formamos parte de ella.
Para definir lo que eres,
las palabras no son suficientes…Pero trataremos de acercarnos lo más posible….
Es bueno aclarar que esto no se trata de conceptualizar sino más bien de
experimentar, de sentir lo que eres realmente y lo más importante, vivir en
base a esta verdad. Y esta verdad se trata de descubrir a
través de tu conciencia/espíritu, el Ser Supremo que vive en ti.
No todo está perdido, cada día son más los
que buscan la libertad permanente, la
cual es mucho más valiosa que el confort
temporal. Llegar a conocer la verdad de
la vida, te ofrece la verdadera libertad, porque ya no te atas a nada, ni nada
te hace falta, simplemente te llenas de
paz y tranquilidad.
La
verdad te libera de la santificación externa, o sea, volver santo a lo externo,
a lo mundano, a los placeres y hasta el cuerpo físico. La mayoría de personas
vive tan sólo para satisfacer los deseos de la carne, para el qué dirán. Viven enfocados por cómo se ven
físicamente, inmersos en el afán diario, trabajo, estudios, pareja…
Solamente
la verdad te permite satisfacer ese vacío interno ansioso de ser llenado con
significado, propósito y comprensión. Las personas por más cosas que logren en
el mundo material, continúan con ese vacío interior, porque lo único que lo
llena es el descubrir la verdad y vivir
en ella.
Entonces,
te planteamos la siguiente pregunta:
¿Qué eres?
·
En realidad somos esencia, somos espíritu,
esa es la fuente real de nuestra vida.
·
Debemos entender que la
existencia humana es trascendental,
eso significa que va más allá de cualquier límite.
Hoy
aprenderás a entender la vida como realmente es. La vida es como un sueño en el que
nacer es como quedarse dormido y morir es como despertar de nuevo.
Estar
en esa vida es como estar en un sueño, porque no somos consciente de nuestra
realidad espiritual, vivimos únicamente para el mundo material y mental, por
eso se dice que estamos dormidos, y es cuando la persona muere, que se da
cuenta lo que es en realidad la vida, que es un espíritu y que simplemente ha
pasado a otra dimensión. Es cuando muere que se da cuenta que el cuerpo físico
y mental son instrumentos para desarrollar nuestra vida espiritual, pero lo que
la mayoría hace es convertirlo en un obstáculo para evolucionar.
Afortunadamente, no es necesario morir,
para darnos cuenta de eso, automáticamente empezamos a ser consciente de esta
realidad, empezamos a despertar.
El
ser humano común tiene un 97% de
conciencia dormida y un 3% de conciencia despierta. Las personas se pasan
la mayor parte del tiempo actuando con la conciencia dormida, es decir que no
es del todo consciente de sus actitudes y mientras más renuente esté la persona
a tal información y asombrosa e increíble le parezca la idea, más dormida
tiende a estar.
La
persona al trabajar, al manejar un carro, al comer, al bañarse, al ver la TV,
es decir al hacer todas sus actividades cotidianas, se encuentra con la conciencia
dormida. Lo más grave es que no se dan cuenta de que están dormidos en esos
momentos. Están haciendo todo de un modo “automático”. Sólo en momentos muy
excepcionales despierta la Conciencia, pero lamentablemente no la siguen
trabajando y la guardan como recuerdo. Cuántas personas hablan y no saben bien
lo que dicen, oyen pero no escuchan, miran pero no observan, tragan en vez de
masticar. Es porque tienen la conciencia dormida y el reconocer este hecho
constituye el primer paso para empezar a despertar.
Para entender mejor lo que
es el ego y lo que somos realmente, hagamos una comparación: Supongamos que esa
Fuente de Energía Universal es como el Océano: Infinito, Inmenso,
Omnipotente…Entonces cada ser humano seria una gota de ese océano. Si tomamos
una muestra de una gota del océano, notaremos que tiene las mismas
características de ese océano: en cuando al sabor, color, olor, etc. O sea que podríamos decir que está hecha a
imagen y semejanza, al igual que el hombre y Dios.
Pero que sucede? Que la
gota del océano al saber esto se cree
que por tener las mismas características, puede ser tan poderosa como el
océano, y termina separándose de él, tratando de hacer todo por si sola (y es
este el gran error del ser humano, el creerse separado del todo, el ignorar que
todos estamos interconectados).
…Pero acaso podrá la gota
por si sola generar una ola? Podrá dar vida a cualquier planta o animal? Podrá
ella formar otro océano igual aunque se una con millones de gotas? Grave error!
La única forma de la gota
poder desarrollar todo su potencial, es reconociendo su pequeñez con relación
al océano y vivir en comunión con este. Sólo así la gotita
se vuelve inmensa y omnipotente, porque toda la inmensidad del mar
también le pertenecería a ella... Puede
lograr cosas inimaginables, no porque hace lo que quiere sino porque hace lo
que debe, lo que es mejor para el resto de las gotas que conforman el océano,
porque obedece a una ley superior que es la voz de la conciencia universal y
porque trabaja para su misión especifica de amor (cada uno tiene una misión en
la vida)…Pero algo muy importante, es que la gota de agua no lo hace por
conveniencia, sino porque esa es su naturaleza, así mismo debemos hacer
nosotros, seguir a Dios por puro amor y devoción. Así como la gota del océano
nosotros debemos entender que separados de nuestra fuente divina no somos nada
y unidos a ella somos todo y esto es lo que busca la espiritualidad, el cultivo diario de una relación personal y
sincera con el Ser Supremo.
Cuando miramos el mundo a
través de nuestro ego nos confundimos, pues este nos engaña haciéndonos creer
que somos él. Nos da su visión, y así nos aleja de Dios, de nosotros mismos y
de los demás, con quienes realmente formamos una unidad que él no puede ni
siquiera percibir, pues es superior a él.
De esta forma hemos
sustituido a Dios por una aberración nuestra, y hemos entrado en un camino sin
salida, el camino del sufrimiento. Debemos retornar a la senda original, al ser que somos, y aprender a elegir bien
nuestros pensamientos y emociones con el
fin de minimizar el ego y eliminar sus códigos de creencias, que nos
condicionan a la hora de actuar. De lo contrario, nos mantendremos en el dolor
indefinidamente.
Existe una forma
tradicional de representar gráficamente al ego, como un pequeño demonio
(instintos animales) sobre el hombro, que nos habla sediciosamente al oído para
que actuemos mal. Pero al contrario, sobre el otro hombro, se representa a un ángel
(voz de la conciencia) que nos anima con su voz suave a practicar el bien,
aunque la decisión al final (libre albedrío) siempre la tomamos nosotros,
eligiendo entre el bien y el mal, entre el amor o el miedo. Aparte de este, no
hay otro dilema en la vida, pues con cada elección que hagamos obtendremos ya
sea la libertad o la esclavitud con respecto de nuestro ego.
Finalmente, para poder
definir lo que eres, no te quedes en las superficialidades, atrévete a navegar
en el mar profundo de tu ser, practica la meditación, practica la auto
observación, la introspección, procura
estar consciente en cada momento de tu vida, en cada cosa que haces, atrévete a
ir un poco más allá de las distracciones de la vida cotidiana y busca en tu
interior, trasciende tus propias barreras, libérate de los miedos los cuales sólo
tú has creado, vive consciente de ese gusanillo que vive en ti que es el ego y atrévete
a interactuar desde tu esencia pura, haz
el bien y ama con intensidad.
Deseo que descubras quien eres
realmente y vivas en plena consciencia de acuerdo a esta verdad…
Infinitas Bendiciones
Voz de la Conciencia
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